En septiembre de 2023, cerca de tres millones de personas trabajaban en España a media jornada a través de contratos a tiempo parcial. En los últimos años, el número de trabajadores con contratos de este tipo ha crecido, porque es un sistema que aporta flexibilidad tanto a las empresas como a los propios empleados.
Son los jóvenes y las mujeres quienes más desarrollan el trabajo a media jornada. En muchos casos de manera voluntaria y, en otros, porque les resulta complicado encontrar un empleo a jornada completa. En cualquier caso, es importante que tanto trabajadores como empresas entiendan bien las implicaciones de este tipo de contratación.
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Contrato a media jornada, ¿en qué consiste?
Los contratos de trabajo pueden clasificarse en función de diferentes criterios. Aunque el más habitual es el de la duración de la relación laboral (por tiempo indefinido o por tiempo determinado), también es común diferenciar entre la contratación a tiempo completo y a tiempo parcial.
El Estatuto de los Trabajadores (ET) establece un límite máximo anual de horas que se pueden trabajar. A partir de esa limitación, llegamos a la conclusión de que la jornada media semanal es de 40 horas, lo que implica trabajar ocho horas en un lapso temporal de cinco días. Cuando una persona tiene un contrato que se ajusta a este tiempo de trabajo, podemos afirmar que desarrolla una jornada a tiempo completo.
La otra alternativa es la media jornada laboral, que implica trabajar un número de horas por debajo de la que se considera la jornada ordinaria de trabajo en cómputo diario, semanal, mensual o anual.
¿Cuántas horas son media jornada?
Se suele caer en el error de pensar que hacer una media jornada implica trabajar 20 horas a la semana, porque se entiende que, si la jornada completa son 40 horas semanales, la media debe ser justo la mitad. Pero esto no es así.
Nuestra legislación es bastante flexible cuando se trata de determinar cuánto es media jornada. De hecho, es posible que las horas de trabajo ni tan siquiera estén distribuidas de manera uniforme. Para saber en una media jornada cuántas horas son en un puesto concreto, lo primero que hay que hacer es revisar el convenio colectivo que resulte de aplicación en esa empresa, porque este va a determinar cuál es la jornada completa.
Todo lo que esté por debajo de la jornada completa prevista en el convenio, se va a considerar como media jornada. Por ejemplo, si en una determinada empresa la jornada ordinaria en cómputo semanal es de 40 horas, podemos considerar que tiene media jornada quien solo trabaja 20, pero también quien realiza 38 horas semanales.
En un contrato de 20 horas semanales, cuántas horas al mes se trabajan es fácil de determinar. Si hay cuatro semanas por mes, salen un total de 80 horas mensuales. Si el convenio señala que en esa actividad la jornada ordinaria está por encima de las 20 horas semanales, estamos ante un caso de media jornada. Si resulta que en esa actividad el tiempo de trabajo ordinario es de 20 horas semanales (el ET establece un tiempo máximo para la jornada, pero no un mínimo), estaríamos ante un contrato a jornada completa.
¿Cómo saber si estamos ante un contrato de media jornada?
Como acabamos de señalar, las horas que se consideran media jornada dependen de lo que diga el convenio colectivo, pero hay más elementos que hay que tener en cuenta.
Estatuto de los Trabajadores
La regla general que recoge esta norma es que la jornada laboral máxima es de 40 horas a la semana, de forma que todo lo que esté por debajo de este tiempo de trabajo sería una media jornada. Pero sabemos que hay sectores en los que, por sus especiales características, la jornada media ordinaria puede estar por debajo de este tiempo y, por ello, debemos revisar el convenio.
Convenios colectivos
Son estas normas las que determinan de forma concreta lo que se considera una jornada ordinaria en ciertos sectores o empresas. Por tanto, resulta mucho más sencillo identificar la media jornada si partimos del tiempo de trabajo ordinario que recoge el convenio aplicable.
Contratos laborales
El propio contrato siempre debe determinar si es a jornada completa o a media jornada. Además, recoge la forma en la que se van a repartir estas horas, porque no siempre se harán de forma homogénea.
Por ejemplo, un trabajador con jornada parcial de 20 horas semanales puede trabajar cuatro horas durante cinco días a la semana, pero también puede hacer dos jornadas de ocho horas y una tercera jornada de cuatro horas, y no trabajar más el resto de la semana.
Las horas extra en el contrato a media jornada
¿Media jornada y horas extra son compatibles? Si se estableciera una total libertad para que los empleados con contrato a tiempo parcial hicieran horas extra, esto podría dar pie a muchos fraudes, porque los empleadores podrían contratar personas a media jornada para pagar menos a la Seguridad Social, y luego ampliar su jornada a base de horas extraordinarias.
Para prevenir la existencia de falsos empleados a media jornada, la legislación ha establecido una serie de límites. En primer lugar, la realización de horas fuera de la jornada regular debe pactarse por adelantado. Puede constar en el contrato o en un anexo firmado posteriormente por las partes, pero siempre debe figurar por escrito.
El documento debe indicar exactamente el número de horas extra que el empleador puede exigir a su empleado, y en ningún caso estas pueden superar el 30 % del total de horas contratadas (el convenio puede elevarlas hasta el 60 %).
Solo pueden realizar horas extra aquellas personas contratadas a media jornada cuyo contrato supere las 10 horas y, en todo caso, hay que notificar la necesidad de este tiempo de trabajo extra con una antelación mínima de tres días.
Pasado un año desde que se firmó el pacto de horas extraordinarias, el trabajador puede ponerle fin si no desea seguir realizándolas. No es necesario que alegue ninguna causa que justifique su decisión, pero debe comunicarlo al empleador con 15 días de antelación a la renovación del pacto.
Como es lógico, todas las horas extra realizadas deben aparecer debidamente reflejadas en la nómina, especificando que tienen tal condición. Y, en cualquier caso, hay que respetar el régimen general de descanso entre jornadas y de descanso semanal.
Media jornada: horas y sueldo
Los derechos de un trabajador a media jornada son exactamente los mismos que tiene un empleado a jornada completa. Por tanto, el sueldo aplicable es el que determine el convenio colectivo de aplicación para el puesto ocupado, pero prorrateado al número efectivo de horas trabajadas.
El salario que recoge el convenio es el establecido para la jornada mensual ordinaria. Si se trabajan menos horas que las estipuladas, entonces hay que hacer el cálculo para determinar cuál es la parte proporcional que tiene que cobrar quien presta servicios durante menos tiempo.
Por lo que se refiere a las vacaciones, el cálculo se hace de igual manera que para los contratos a tiempo completo. Si el convenio establece que en esa empresa se disfrutan de 22 días laborables al año, quienes tienen un contrato a tiempo parcial tienen también esos días de vacaciones. Es decir, que trabajar menos horas no implica tener menos días de vacaciones.
Con respecto a la Seguridad Social, desde 2023 todos los trabajadores cotizan por días enteros, con independencia del número de horas realizadas en cada jornada. No obstante, como la cotización de una media jornada es inferior en su cuantía a la de una jornada completa, esto afectará al importe que se va a percibir en caso de tener que acceder a la prestación por desempleo o a una prestación por incapacidad temporal.
Ventajas de los contratos a media jornada
Este tipo de contratación ofrece beneficios tanto a las empresas como a los trabajadores:
Ventajas para los trabajadores
- Favorece la conciliación. Al trabajar menos horas, el trabajador dispone de más tiempo para dedicarlo a sus responsabilidades personales y familiares.
- Menos estrés. Menos tiempo de trabajo implica menos sometimiento a estrés.
- Aumento de la experiencia. Para muchas personas, un contrato a media jornada es una forma de ir ganando experiencia para seguir avanzando en su carrera profesional y optar más adelante a un contrato de jornada completa.
- Combinar varios trabajos. Una persona con contrato a media jornada puede compaginar este empleo con otros, incluso con la gestión de un negocio propio.
Ventajas para las empresas
- Aporta flexibilidad. Permite a las empresas adaptarse más fácilmente a los cambios en la demanda.
- Reduce los costes laborales, porque implican pagar menos en salarios y en cotizaciones a la Seguridad Social.
- Eficiencia. Las jornadas laborales más cortas son más efectivas. Los empleados rinden más cuando su jornada es menor.
- Prueba de trabajadores. Es una fórmula efectiva para conocer a los trabajadores antes de ofrecerles un contrato a tiempo completo.
¿Cómo gestionar los horarios de media jornada?
La gestión del tiempo de trabajo es esencial en la media jornada. La empresa debe contar con un sistema que le permita tener cubiertas sus necesidades, evitando solapamientos innecesarios de turnos. En este sentido, la tecnología puede ser de gran ayuda, como ocurre con los programas de control horario.
